Ojos

Para la prevención de la enfermedad ocular en presencia de enfermedades crónicas como la Diabetes y la hipertensión arterial, en las que se ven altamente involucrados los vasos sanguíneos se ha demostrado que la disminución de glucosa y presión arterial contribuye a una reducción del riesgo de desarrollar retinopatía. Con la reducción del 10% de glucemia, reflejada mediante la hemoglobina glucosilada se reduce el riesgo en aprox. un 60% y un 43% el riesgo de que una retinopatía diabética ya existente empeore.

Así mismo, se ha comprobado que el control de la hipertensión en personas con Diabetes Mellitus tipo 2 reduce el progreso de retinopatía en mayor grado que con el control dietético estricto. La reducción de 10/5 mm en la tensión arterial (por ejemplo, bajar de 150/90 a 140/85) reduce el riesgo de pérdida grave de visión en casi un 50%, así como de Enfermedad Vascular Cerebral (EVC) hemorrágico en un 44% y de muerte prematura en 32%. La mayoría de los expertos recomienda que las personas con Diabetes mantengan su tensión arterial por debajo de 130/80.

Para prevenir el desarrollo de la retinopatía diabética se debe realizar revisiones visuales con pupila dilatada de manera anual, por un oftalmólogo, en un 50% de las personas con Diabetes no se realiza un examen al año con lo que se ve un incremento en la incidencia de enfermedades visuales asociadas a la Diabetes, para cuando la persona ha desarrollado los síntomas de la enfermedad ya existen daños irreversibles en el ojo y el pronóstico es malo para el tratamiento.

 

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